miércoles, 27 de marzo de 2024

La distancia

El destino; celoso quizás de lo imposible, hizo retroceder mis noches. Siempre hay algo de misterio en lo que deja el mar.

La intención y el tiempo para respirar un aire de otras latitudes; destruyendo los silencios intermitentes, graves, demasiado ásperos… como la luz de tus ojos. 


El destino juega con aquel que no tiene tanta suerte, ese que besa lo indecible con la punta de los labios, ese tonto peligroso que no se deja querer, que nada espera.


Me quedan algunas preguntas, pocos recuerdos y una pizca de tus miedos, las ideas, los adioses… lo que ya no importa. 


El destino, como un insulto sin esmero se ha posado aquí en mis accidentes, muy cerca de mi piel, tan cerca… como un sueño.


La paciencia, un cálido abrazo, la distancia, una mentira, dos mentiras… muchas.

   

                           Andy Rumbaut

viernes, 15 de marzo de 2024

Ayer

Desperté a medias como una adivinanza, había perdido las palabras dulces en la oscuridad…también los motivos. 

No tenía claras mis metas, solo esta sonrisa pícara que tampoco entiendo. 

Fue una mañana inminente, menos importante, digna de olvidar. 

Desperté como un dios hijo de nadie, con demasiados secretos y también deseos de escapar, un horizonte de papel… bucólico, así sin miedos. 

Fue un día de esos que tienen la virtud de las primeras flores, de los caprichos que me hacen perder la cabeza, de mis deseos y de tus ojos. 

Nadie murió de amor, aunque quisiera que fuera ya muy tarde… solo fue un viaje azul hasta tu espalda ya sin sorpresas. 

¡Oh, qué suerte sería para mi yo errante que volvieras! 

La tarde ha traído besos sin dueño para compartir de nuevo.

Quise perderlo todo una vez más, las razones, la mirada, los vacíos, la inocencia y los abrazos quizás.

Nunca fueron demasiados los atardeceres ni los caminos, nuestra locura deliciosa o el verbo frágil.

Nunca fueron demasiadas las horas, las promesas o las caricias. Me fui a dormir a medias evitando la nostalgia, no respiras aquí sobre mi pecho estival. 

Mañana será un día más… un día menos y soñaré despacio para alcanzarte, para gritarle tu nombre al viento, para matar con tu recuerdo la distancia. 



                                        Andy Rumbaut

domingo, 21 de enero de 2024

Las horas.

Prefiero soñar, morder tu karma, amanecer perdido en tu casualidad; cautivo de la prisión al final de tus espaldas.

Llévate mis preguntas, los momentos y los besos… prefiero soñar, gritarle al viento. 

¿Quién sabe de susurros y razones?

 Prefiero el misterio, perder la cabeza y las tempestades, quemar tus pausas y decir adiós a los deseos… el ayer viene a curarme la tristeza y tengo miedo.

Ya no es "tal vez" o "quizá"… Lo siento.

¿Recuerdas mis besos? ¿Mi lengua caprichosa y mis abrazos fieros?

Traigo heridas la locura y la sorpresa, hoy prefiero borrar tus versos.

¡Pero no olvides amor, llévate el cielo! ¡Borra mis pasos que se beben la distancia… que se duerman para siempre los espejos!


               Andy Rumbaut

jueves, 4 de enero de 2024

Limbo.

Ya no tengo edad; no soy joven o viejo, nadie puede leer en mí el recuerdo de las muchas cosas muertas, felices o tristes.

Ahora buscan mis olas lamer ese paraje incierto donde se me olvida hasta el nombre y en tus ojos me pierdo.

Me queda la mirada oscura de sombras… de atardeceres y de algo que aquí en mi pecho se niega a volar, algo coronado por muchos inviernos.

¡Déjame olvidarte!

¡Duerme para siempre en mi regazo, regálame una lívida pregunta que rompa despacio los espejos!

Quiero besarte amor, tenerte cerca, darte mi voz irrelevante cada tarde, ver aparecer tus cortos pasos y aquel susurro… las caricias!

Ciertas y difíciles noches cuando jugar a ser dos no es importante, tú respiras y yo crezco… inefable, hilvanando con tu pálido cabello las mentiras, disipando la buena suerte y tu saliva misteriosa.

Cada instante, cada beso, la tenue sonrisa.

¡Déjame olvidarte! 

                        Andy Rumbaut 

jueves, 28 de diciembre de 2023

Lejos.

Esa palabra dispersa es pronombre y recuerdo.

Tengo el momento que duele y la promesa, tengo el invierno. 

Ya mi camino sigue siendo eso y poco más; no es distancia es solo miedo, la certeza demasiada… tiemblo.

¡Hombre fugaz y eterno quédate en mi pecho!

Tengo momentos que duelen, tengo el infierno.

Gritan mañanas mis huesos que no abrazan ya tus pasos… no llegarás nunca a tiempo.

El destino es imprudente, sordo y ciego… casi cruel. 

Vete a ganar otras guerras, otra magia y también otros efímeros instantes… te lo mereces.

Tengo tus voces que mi nombre susurran… yo te quiero.

¡Hombre de niebla y nostalgia márchate lejos! Lleva contigo mis credos, el eco y todo lo que no sea suficiente, yo espero.

…esa palabra dispersa, pronombre, recuerdos.


Andy Rumbaut 

martes, 26 de diciembre de 2023

Déjà vu.

 


Alguien podría pensar no sin razón que las mías son palabras vacías…

¡Este es uno de esos momentos donde morir ya no es urgente!

A las puertas de tu piel el deseo se me escapa, esgrime una sonrisa torcida... incierta, le dice adiós a mis dudas y no quiere saber de caminos o secretos. 

 Todo el peso de lo aprendido cae, se rompe como la memoria indiscreta que me asusta, allí donde no me sobran los besos… otra persona soy. 

Se me han olvidado el instinto, el lujo y los detalles; pierdo los años y las horas a pedazos... de nada sirve el dolor!

Hoy me atrevo a sustanciar la belleza de mi pensamiento, es una historia real, lógica… mezquina, que no por remota deja de ser interesante.

Desde que te fuiste le temo a todo…o a casi todo!

Borraré con saña tu calle de todos los mapas, la acritud, el tiempo… las migajas.

Demasiado digno, con los ojos hartos del vaivén y la certeza, los ajenos envites, el sueño que debería ser y no era aquel.



Andy Rumbaut 

lunes, 18 de diciembre de 2023

El poema inacabado.

 La duda y la sorpresa tienen un fino sabor a desencuentro.

Esta es una historia reciclada, la encontré hoy forjando utopías y tratando de encontrar una respuesta a esos caprichosos enigmas que me rodean de dos en dos cada cierto tiempo.

Es la cobardía elemental donde devenir literalmente cuerdo no es lo más importante.

La impaciencia que hace más largos mis días cierra mis puertas y mis voces... me salpica risueña con su mágica sonrisa. 

Ya no tengo recuerdos, solo páginas manchadas, una mentira y un espejo. 

No es el fin de estas mis huellas, es tu abismo que devora mis pupilas. 

Pensar… pensar la madera, la lengua… la distancia. 

¡Poseer este secreto me dejará vacío!

La duda me sorprende, ya no es mi naturaleza más sabia. 

A veces parecer absurdo es una tarea muy complicada, tanto… que el más bello de los hombres puede hacerlo.

¡Aquí no se vale andar por las ramas!

Hoy es tiempo de nacer.

                 Andy Rumbaut